Y, ¿el velero? Una historia interminable
Se cumplía un año, -¡un año entero ya!- y todavía seguía en tierra. De repente me pareció que botar el velero iba a ser misión imposible. Mi energía para seguir actuando de armadora se esfumaba a la velocidad de la luz. Percibía que me había infiltrado en una historia interminable…
1 comentario